Cuidando al Príncipe de Orange Philodendron
El filodendro Príncipe de Orange recibe su nombre de sus hojas de tonos únicos, que cambian de color con el tiempo. El nuevo crecimiento comienza con un estallido de color amarillo cuando emerge por primera vez, pasando primero a tonos cobrizos y finalmente estableciéndose en tonos más oscuros de verde.
Esta planta es un híbrido de filodendro autónomo. A diferencia de muchas variedades de filodendro, al Príncipe de Orange le crecen sus hojas vibrantes desde su centro en lugar de enredaderas o tallos. Dejando a un lado su color brillante, se ve y crece de manera muy similar a un filodendro Congo, excepto que solo alcanzará alrededor de 2 pies de altura en su punto más grande.
El Príncipe de Orange aprecia una ubicación luminosa en su hogar u oficina, fuera del alcance de la luz solar directa, en un lugar donde reciba mucha luz ambiental o filtrada durante todo el día.
El Príncipe de Naranja muestra muchos colores diferentes durante el ciclo de vida de sus hojas. Un nuevo crecimiento emerge del centro de la planta, de color amarillo/naranja, y luego se vuelve verde. Las hojas más viejas hacia el exterior de la planta también se vuelven amarillas, así que asegúrese de diferenciar entre el cambio normal de color de las hojas y la coloración que indica mala salud antes de podar.
El Príncipe de Orange puede crecer y ampliarse con el tiempo. En las condiciones de iluminación adecuadas, puede duplicar su tamaño en un año.
Mantenimiento de rutina
Asegúrese siempre de evaluar las necesidades de riego de su planta al recibirla. Antes de darle de beber a su planta, es mejor verificar primero el nivel de humedad en el suelo para asegurarse de que no esté húmedo justo debajo de la superficie. Además, considere airear la tierra de su planta antes del riego inicial. Los almacenes compactan la tierra para evitar que se mueva durante el tránsito, por lo que la aireación puede ayudar a que la tierra respire y permita que se libere la humedad.
Los filodendros prefieren un suelo que esté constantemente ligeramente húmedo, especialmente si quieres que les crezcan hojas grandes. Como epífitas con raíces aéreas, son sensibles al exceso de agua, por lo que no quieren sentarse en suelos empapados. Por lo general, no deberías tener que regar tu Príncipe de Orange más de una vez por semana. Cuando las 1 a 2 pulgadas superiores del suelo estén secas, a su planta le vendría bien una bebida. ¡Descanse tranquilo sabiendo que esta planta es resistente y fácil de cuidar!
Gire su planta periódicamente para asegurar un crecimiento uniforme en todos los lados y espolvoree las hojas con frecuencia para que la planta pueda realizar la fotosíntesis de manera eficiente. Al quitar el polvo de las hojas, aprovecha también para inspeccionar el envés y estar atento a las plagas.
Recuerde que cada planta es un ser vivo único y puede tener diferentes necesidades, especialmente en sus ubicaciones individuales. Preste atención al estado de su Filodendro Príncipe de Orange y a sus necesidades de riego y tendrá una relación larga y feliz.
Gire su planta cada pocas semanas para que crezca proporcionalmente. Al Príncipe de Orange le encanta inclinarse hacia la luz, por lo que girarlo ayudará a que se mantenga lleno por todos lados.
Información cortesía de GreeneryUnlimited.co